Paisajes de Angel Pascual Rodrigo,

en la frontera de la luz y de la nada

 

 La Sala CAI Luzán presenta la última obra del artista aragonés afincado en la isla de Mallorca

30/01/2005




 

TITULO: Y así pasa y queda.

LUGAR: Sala CAI Luzán. Paseo Independencia, 10 Zaragoza.

AUTOR: Angel Pascual Rodrigo.

FECHAS: Del 27 de enero al 2 de marzo de 2005.

HORARIO: De lunes a sábado, 19 a 21 horas. Domingos y festivos, cerrado.

CATALOGO: Textos del propio pintor, de María Dolores Albiac y de Francesc Bujosa
 
 

Insistencia en la levedad de lo que existe cuando la luz entra o sale del día. Cualquier elemento material del paisaje comienza a aparecer (o a desaparecer) con la luz, como si estuviera situado en la frontera de la existencia. El milagro de ver, en virtud de esa luz que primero descubre, luego marca y que remarca por fin a los seres del mundo. Que fija en lo visible al agua, a los árboles, a la montaña y, sobre todo, al aire.

Paisajes de planos sucesivos en ascenso hacia el fondo. Escenas de montañas diagonales y casi japonesas. Escalas del verde al rojo, hay siempre transiciones (a veces de izquierda a derecha) desde lo informe a la forma, de lo etéreo a lo compacto; del reflejo al mismo ser tangible. Algunos cuadros revelan las varillas de su construcción, los tensores formales, las trayectorias infinitesimales de la retina.

Columnas esenciales que refuerzan la simetría de la instalación y enmarcan naturalezas muertas multiplicadas. Que esconden las secretas líneas maestras de la Venus de Giorgione o los peldaños de Atala de Girodet hacia el color. Cuatro paisajes desnudos, atmosféricos que flotan, que pugnan por elevarse y a punto de perder el anclaje con el suelo. Paisajes de viento, de calma, de lluvia y de noche.

Bosques simplificados en los que todo asciende siguiendo órdenes genéticas estrictas en cada especie, aunque la sensación sea de un azar gratuito. ¿Hay un recorrido necesario por la sala? Sólo existe un imperioso "¡Mira!", muy cerca de la puerta.